Biocidas

Los productos biocidas incluyen, entre otros:

• Insecticidas (excepto fitofármacos regulados por el Reglamento (UE) n.º 1107/2009)
• Productos contra las cucarachas, etc
• Desinfectantes
• Conservantes para materiales como madera, plástico y fibras
• Revestimientos antiincrustantes para la protección de barcos
  Estos productos juegan un papel importante en la vida diaria de los ciudadanos de la UE, ya que protegen, por ejemplo, contra:
• Enfermedades difundidas por transmisores (p. ej., malaria, dengue y chikungunya)
• Enfermedades transmitidas a través de los alimentos (por ejemplo, salmonelosis, listeriosis)
• Infecciones hospitalarias (por ejemplo, MRSA).

También se utilizan a menudo en productos como plásticos, pinturas, textiles, madera y similares, para proteger estos materiales de la descomposición debida a microbios, hongos o insectos.

Sin embargo, los productos biocidas pueden suponer un riesgo para los seres humanos, los animales y para el medio ambiente debido a sus propiedades específicas. Por lo tanto, la UE ha establecido reglas y procedimientos estrictos para reducir estos riesgos.

El Reglamento sobre productos biocidas (Reglamento (UE) 528/2012) se refiere a la puesta en el mercado y uso de productos biocidas que, por la acción de las sustancias activas que contienen, se utilizan para proteger a personas, animales, materiales o productos. contra organismos nocivos, como plagas o bacterias. El objetivo de este reglamento es mejorar la eficacia de los productos biocidas en el mercado de la UE al mismo tiempo que se garantiza un alto nivel de protección para las personas y para el medio ambiente.

Todos los productos biocidas deben ser aprobados antes de su comercialización, y sus principios activos también deben ser aprobados previamente. Sin embargo, hay ciertas excepciones a este principio.

El objetivo del Reglamento es armonizar el mercado a nivel de la Unión.

Como en la directiva anterior, la aprobación de las sustancias activas se realiza a nivel de la Unión, y la consiguiente aprobación de los biocidas a nivel de los Estados miembros. Esta aprobación también puede extenderse a otros Estados miembros a través del reconocimiento mutuo. Sin embargo, el nuevo reglamento también ofrece a los inversores la posibilidad de un nuevo tipo de autorización a nivel de la Unión (autorización de la Unión).